miércoles, 25 de junio de 2014

Adiós, Alberto

Hoy ha pasado una puta desgracia, y es que alguien a quien apenas conocí durante unos meses, y nunca en persona, se ha ido. Me bastó para saber que era un buen chico, y para mí fue una experiencia enriquecedora haber compartido con él conversaciones, tontas, inútiles, profundas, la mayoría de ellas de esas que no puedes dejar pasar por alto porque de quien proceden tiene algo especial. Él era un poeta, me dijo que sus poesías más íntimas las escribía siempre a boli en un cuaderno. Ojalá que alguien las encuentre y le haga inmortal, pero, en cualquier caso, quien tiene amigos escritores nunca muere, y quien sabe dejar huella tampoco. Él vivirá en nosotros, en los que le conocimos un poco y en los que le conocieron más, en los poemas, en los soñadores, en el aire fresco y en los violines. Me decía que escribíamos casi la misma prosa y la misma lírica, que leerme a mí era como leerle a él. Ojalá que eso baste para que algo de esta ceniza que vomitan mis ojos y mis manos llegue hasta él. Cuando muere un poeta muere un trozo del alma de la tierra, morimos un poco todos. Pero no solo ha muerto un poeta, ha muerto Alberto, por eso me jode. 

No tenías derecho a morirte,
a darle la razón a esa puta.
Yo no puedo quedarme así,
sin saber si al final ibas a comprarte
aquel terrario con hormigas,
sin saber por qué no me enteré de nada
cuando te empezaste a ir
y, sobre todo, si alguno solo de tus pensamientos
fue para mí, en esos últimos suspiros.
¿Qué pasaba por tu mente? ¿Es cierto que no
te quedaban fuerzas?
Seguro que nunca se te acabó la poesía,
no pudo haber pasado también eso.
Sal ya, Alberto, de esta broma pesada
que me están gastando;
tú y yo teníamos que conocernos.
¡Me tuviste tantos días preocupada!
Te hablé, pero nadie contestaba,
claro, estas cosas son así,
nunca nadie contesta cuando pasa algo.
Nunca voy a perdonarte, que lo sepas,
que al final te hayas muerto,
¡dijeron que las palabras no podían morir!
Pero lo hacen, y se nos llevan por delante,
y no sé si primero se van ellas o nosotros
así que tienes que volver para decírmelo
y para llevarme a ese pueblo tuyo en Francia
que parecía tan bonito.
Ya verás, me voy a cabrear mucho
cuando me digan que todo es una broma,
pero aun así voy a sonreír
cuando sepa que tu pulmón está bien,
junto a ti, y que los dos os dais calor.
¿Y qué edad tenía? Pregunta la gente,
pero no me preguntan tu nombre
o si querías a tus perros,
o a cuántos habrás dejado en llanto
escribiéndote un poema cuando ya no estás,
cuando ya no estás…

-Cuando te leí por primera vez me pareció estar mirando un pedazo quebrado de un espejo que refleja el alma.
-Repúdiala todo lo que quieras, teme tanto como puedas esa maldición que es escribir, pero los poetas nos desnudamos en nuestros versos.

Él me caló bastante bien y discutíamos por ello. "Baja las armas, poetisa", me decía, porque quería que me quitara el escudo que llevo siempre para defenderme de todo, y yo le decía que no, que no llevaba ninguno, pero nunca conseguí engañarle -o tal vez por desgracia sí-. Yo escribía pésimos poemas a causa de algunas conversaciones, y él se los guardaba en un documento de Word como si realmente valieran algo, y me echaba la bronca por decirme cosas así. Pero no te preocupes, amigo, que no dejaré de escribir, no lo haré.
Voy a terminar tanto sentimentalismo con unas palabras suyas, a propósito del libro "Momo", que ambos nos leímos y fuimos comentando a la vez...
"El tiempo no se pierde, porque no lo poseemos, porque no existe. El tiempo es otra invención más del humano. "Ahorrar tiempo". Es una idea bárbara. No se puede ahorrar tiempo, porque el tiempo se va, se pierde. Si no lo consumimos nosotros, se consume solo, como una manzana al aire.
Así que lo que mejor podemos hacer en esta vida es gastar el tiempo que tenemos. Porque si no lo gastamos nosotros..., la vida misma lo gastará sin que nosotros lo hayamos usado."

5 comentarios:

  1. No lo conocí pero sí sabía de su existencia. Es una pena que se haya ido y que lo único que compartimos fue un par de Me Gusta en comentarios de Facebook. Más no puedo decir. Saludos. Fuerza.

    ResponderEliminar
  2. Mon coeur saigne, ça caille. Mon p'tit pote est parti. Je suis dans un mauvais rêve, c'est pas possible ! Je suis honorée d'avoir connu Alberto, un grand petit homme qui m'a enrichie.

    ResponderEliminar
  3. ME DA CORAGE... ME REBIENTA... fui tan estupida al principio con él.... y poco a poco sin darme cuenta empezó aconocerme y yo a conocerle a él. Le dije tantas y tantas cosas duras y que dolían.... cualquier otro se hubiese cabreado o como mínimo molestado... pero él no... él hizo una pequeña pausa y me dijo " TE ADMIRO" sin duda eso me impactó, me dijo que me admiraba pues era capaz de mirar a los ojos a la gente y decirle lo que pensaba, sin censura o engaños, o con palabras bonitas para suavizar la realidad.... y ahora intento emgañarme a mi misa, HIRONICO... a él le gustaba de mi precisamente lo que el resto del mundo odia...incluso yo misma odio... Siempre me sentí chiquita a su lado. Yo no se escribir sin faltas, tengo muchas y me averguenzan, intento quitarmelas como puedo. Pero el era tan correcto, tenía tanto vocabulario, escribia tan bien.. Me sentia tan inculta y poca cosa junto a él pero sinceramente no me importaba... jamás me miró por encima del hombro como hacen mucha gente por yo escribir mal... él me decía " te admiro porque te esfuerzas por mejorar y no todos hacen eso..." " te admiro porque se que eres lista, el escribir bien no es sinonimo de conocimiento, solo tienes la mente tan centrada en el resto de cosas que las cosas que calificas o tu mente califica como ' sin importancia' simplemente lo deja de lado" Nunca me miró por encima del hombro... ME REBIENTA... quiero que siga ... que siga diciendome palabras que no entiendo bien y que me las enga que explicar... quiero que me siga preguntando por animales y curiosidades biológicas. Quiero que me siga corrijiendo las faltas... mejoré bastante mi escritura por tu culpa... aparte de mi pareja ¿ quirn va a tener cojones de correjirme ahora sin mirarme por encima del hombro? ¿ quien? .... Seguiré esforzandome por mejorar .... por mi... y por ti... y te prometo Alberto que siempre que este en mi mano cumplire la promesa que te hice...

    Alberto perdona este escrito tan mal hecho, pero con el movil me cuesta escribir. Tu te mereces un escrito mucho mejor que este. Un calido abrazo desde este lado del mundo tu amiga Kanae.

    ResponderEliminar
  4. http://www.youtube.com/watch?v=oDqDA70vj5k&list=RDbrgffpoR_wM&feature=share

    ResponderEliminar
  5. Hola, Kanae; entiendo tu dolor, y te agradezco que lo hayas compartido con nosotros a pesar de todo.
    No merece la pena culparse por lo que uno hizo o dejó de hacer, lo importante es tener fuerza para mejorar y
    seguir adelante, y veo que tú la tienes. Ánimo con las faltas, un saludo.

    ResponderEliminar